Joaquín Bilbao vuelve a la calle

Son diecinueve fotografías reunidas bajo el título de 'Homenaje a Joaquín Bilbao (Gijón/Xixón, 1959-2015), fotoperiodista'. Ese título se queda corto para hablar de alguien que era todo un personaje de Gijón, que conocía prácticamente a media ciudad, que se movía como pez en el agua por sus calles con su moto y su cámara al hombro. Bilbo o Cari, como en esta redacción se le llamaba en aras de rebautizarle a él con el apelativo cariñoso que dedicaba a todos los compañeros, comenzó a trabajar en La Hoja del Lunes de Gijón pasando posteriormente por La Nueva España, La Prensa, La Voz de Asturias y finalmente EL COMERCIO.

Son, pues, sus imágenes historia reciente de una ciudad que ha ido transformándose desde aquellos felices ochenta hasta ese cercano ayer de diez años cuando Bilbao dijo adiós. «Entre estos sucesos, deben destacarse las movilizaciones de los trabajadores del sector industrial en defensa de sus puestos de trabajo durante la reconversión de la industria, los cambios urbanísticos de Gijón o los eventos deportivos (fútbol, baloncesto, ciclismo o automovilismo, disciplina de la que era gran aficionado», señalan desde el museo.

Más de 100.000 fotografías, en su mayoría negativos de 35 mm, componen el legado visual de Bilbao, cuyo archivo incluye también el del fotoperiodista Ramón González Fernández (1961-1993) que su familia donó a Bilbao tras su repentina muerte. El museo ha digitalizado más de 5.000 fotografías del fondo de Joaquín Bilbao, que están disponibles para su consulta pública en el repositorio municipal: fondos.gijon.es.

El fotoperiodismo tiene así una notable presencia en el museo, que cuenta con los fondos de Constantino Suárez (1899-1983) o José Vélez (1931-2012), así como, los archivos fotográficos de diarios o revistas como La Prensa, de Gijón, El Progreso de Asturias, de La Habana, y La Voz de Asturias, de Oviedo, a los que hay que añadir las fotografías cedidas por los fotoperiodistas Juan Carlos Tuero y Eduardo Urdangaray.