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Hace once años, cuando el Rodiles se embarcó en la aventura del fútbol sala femenino, ni siquiera había una liga federada en Asturias. El equipo tuvo que inscribirse en la cántabra, que ganó, para dar una alternativa a las muchas jóvenes que querían competir en este deporte con su camiseta. Hoy están muy cerca de conseguir llegar la Primera Iberdrola, tras tres años cayendo en el 'play off'. Después de conseguir batir al Penya Esplugues por 5-2 en Villaviciosa, el sábado defenderán la renta en Barcelona ante el campeón del grupo del Mediterráneo, uno de los equipos más fuertes de España en la Segunda División. «El resultado no es definitivo. Hay ilusión por el ascenso, pero tenemos los pies en el suelo», explica Faustino Ortiz, presidente de la entidad, consciente de que primero habrá que pasar esta eliminatoria para superar después una segunda si quieren llegar a la máxima categoría.
Mucha culpa de la buena marcha del equipo, que cuenta con el patrocinio principal de El Gaitero, la tiene Santi Tuero. Coordinador del club y entrenador del equipo sénior femenino, sabe que el resultado de la ida de la primera eliminatoria por el ascenso es muy favorable, pero no quiere lanzar las campanas al vuelo. «Hubiéramos firmado el 5-2 antes de empezar el partido, pero nos pusimos 5-0 y nos hicieron los dos goles al final. Sabemos que vamos a sufrir en Barcelona».
La filosofía del club está clara desde hace años. El Rodiles F. S. cuenta con una amplia cantera en la que juegan más de 60 niñas, pero son conscientes de que para llegar a lo más alto es necesario contar con refuerzos. En su primer equipo cuentan con cuatro canteranas, a las que se suman jugadoras llegadas de fuera. Una de ellas es la capitana, Ángela Guimaraes, quien cumple su tercera temporada en el club. La suya es la historia de una joven brasileña que estaba acostumbrada al fútbol sala de alto nivel en su país y que buscó la aventura en España. Comenzó en Galicia, donde las cosas no salieron como esperaba. «Estuve tres meses en Poio, pero las cosas no fueron bien y volví a Brasil. Santi (Tuero) preguntó por mí y me hacía ilusión jugar en España, así que acepté».
Lo que se encontró en Villaviciosa fue todo positivo. Primero, por el paisaje, muy similar al que domina Paraná, la zona de la que proviene «Estoy enamorada de las montañas de Asturias». Segundo, por la gente, que la acogió «muy bien. Más que un equipo es una familia». Y tercero, por el juego. «Me encontré con un nivel mucho más alto de lo que esperaba», confiesa. Acostumbrada a un fútbol sala con menor rigor táctico, en el que a las futbolistas se les da «más libertad» para jugar de una forma más «intuitiva», en la Segunda española se encontró con un modelo en el que lo estratégico tiene mucho peso. «El entrenamiento es bastante táctico». Con un fútbol sala basado en el sistema 3-1, más tradicional que el juego 'de cuatro', el Rodiles F. S. se ha hecho un hueco entre las mejores de Segunda. «Es un modelo de juego que va desde las pequeñas a las mayores. También podemos jugar 'de cuatro' si el partido lo requiere, pero nosotras lo hacemos con cierre, alas y pivote. Especializamos a las jugadoras», apunta Santi Tuero.
Con el brazalete de capitana, Ángela Guimaraes intentará junto a sus compañeras superar las dos eliminatorias que les separan de la Primera División, una meta fijada desde hace ya hace ya varios años. «El ascenso es como un sueño, pero también un objetivo desde que llegué. Sabemos que es complicado y depende de muchos factores. En mi primer año no estábamos tan preparadas, el segundo mejoramos y este tengo la sensación de que estamos mejor». Que la meta no se ha fijado este año lo ratifica también el presidente de la entidad, quien recuerda que la lucha por el ascenso «no es cosa de un año, vienen de varios atrás».
Conseguir que un equipo nacido en 2014 esté peleando once años después por llegar a Primera no es una tarea sencilla en lo deportivo y tampoco en lo económico. El Rodiles F. S. cuenta con patrocinios que alivian las cuentas del club, pero también con una peculiar fórmula de financiación: la organización de eventos deportivos. Con una empresa creada expresamente para canalizar estos ingresos, el Rodiles ha conseguido contar con un buen presupuesto que les permite llegar a competir por estar en la élite. «Ofrecemos alojamiento, comida, visitas culturales y competición. Las jugadoras nos ayudan a estar pendientes de los equipos. Hay que dedicarle mucho tiempo, pero nosotros vendemos Asturias», explica Faustino Ortiz, quien mantiene la ilusión por ver a su equipo la próxima temporada en Primera.
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