Adjudicada por 33 millones la reforma de siete túneles de las autovías del Cantábrico y A-64

Siete túneles de la autovía del Cantábrico (A-8) serán reformados para dotarles de galerías de escape y más medios con los que reaccionar ante un accidente. La obra adaptará estas infraestructuras a los requerimientos marcados por la directiva comunitaria y un real decreto del año 2006. El retraso en reforzar los túneles conforme esta normativa motivó que la Comisión Europea abriera un expediente de infracción contra España primero, y que luego aceptara que parte de los fondos que entrega al Plan de Recuperación se destinen a financiar estas costosas actuaciones.

El Ministerio de Transportes licitó la adaptación a la norma de los túneles de Fabares, Villaviciosa, Deva, Infanzón, Cefontes, Brañaviella y Niévares, todos en las autovías del Cantábrico (A-8) y Oviedo-Villaviciosa (A-64). Analizadas las propuestas de los 14 aspirantes, la mesa de contratación acaba de proponer confiar la tarea a la Unión Temporal de Empresas (UTE) formada por la viguesa Civis Global, la asturiana Comsa y la vasca Elecnor. El contrato suma 33,9 millones, con un plazo de ejecución de 32 meses.

Por otra parte el Consejo de Ministros dio luz verde a una reparación de emergencia en el ramal de la A-8 hacia Cogersa, donde hay que sanear un drenaje por 925.932 euros.